Hoy os voy a dar unos conceptos generales, para que una vez que estéis en vuestro peso ideal, no volváis a adelgazar.
A una persona con tendencia a engordar le cuesta mucho mantener su peso ideal. A esto se le llama en Spanish,efecto yo-yo.
Efecto YO-YO, ó efecto rebote: adelgazo y vuelvo a engordar, vuelvo a adelgazar y vuelvo a engordar.
Lo peor del efecto Yo-yo es que cada vez que intentamos adelgazar, nos resulta mucho más difícil. (Los motivos son varios pero ahora no vienen al caso).
Caso práctico:
Imaginamos alguien que quiere adelgazar, y decide ir al médico, o a un nutricionista para que le asesoren y le den unas pautas alimenticias, vamos a ser claros, va a un especialista para que le den una dieta de adelgazamiento.
Nuestro amigo, Joaquín, hace dieta durante un tiempo, más o menos largo, dependiendo de su fuerza de voluntad y posiblemente después de mucho esfuerzo llegue a su peso ideal.
En este caso Joaquín necesitaba perder 10 kilos, y estuvo un año entero haciendo dieta.
No pasaba hambre, pero tenía ganas siempre de comer algo prohibido.
Durante el año entero que siguió la dieta, cometió algún desliz, había celebraciones familiares y con amigos a lo largo del año que era imposible eludir, y en las que comía lo que le apetecía.
Aún así, nuestro amigo Joaquín tenía una fuerte fuerza de voluntad y cuando quedaba con sus amigos para tomar algo, bebía agua, cuando iban a cenar por ahí comía ensaladas variadas, y cuando tenía que comer fuera por trabajo, elegía siempre opciones del menú que se ajustaban a lo que le decía la dieta diaria que debía comer.
Aunque no era necesario, cuando nuestro amigo Joaquín seleccionó a un nutricionista, eligió uno de pago, que le cobraba todos los meses por pesarlo, medirlo y ver su evolución.
Como ya os podéis imaginar, tener que pagar todos los meses, a Joaquín, le motivaba para alcanzar su peso ideal cuanto antes.
Después del año a dieta, y en la última visita al nutricionista, Joaquín estaba feliz, por fin era un chico delgado, ya no era el gordito.
Para celebrarlo……¡se fue de comilona con sus amigos! y después se fueron de copas toda la noche.
Si este tipo de celebración por conseguir el peso ideal hubiese sido puntual, nada hubiese pasado, Jaquín ya había visto a lo largo del año que un desliz no impedía seguir adelgazando (más o menos rápido) si mantenías la dieta pautada por el nutricionista.
El problema de Joaquin, y aqui hago extensivo el problema a la mayoría de la gente que hace una dieta, alcanza su peso ideal, es que volvió a su estilo de vida anterior, volvió a comer como comía cuando estaba gordito, y se empezó a olvidar de hacer un poco de ejercicio diario.
Conclusión:
En menos de un año, Joaquín había vuelto a engordar, y ahora pesaba incluso más, que la primera vez que decidió ponerse a régimen.
Como reflexión os diré que el 99% de los consejos consisten en disminuir el consumo de calorías totales, disminuir el consumo de grasas, seguir una dieta estricta y hacer ejercicio cardio de baja intensidad, por largos periodos de tiempo, solo estropeará tu metabolismo y te causará enfermedades.
El secreto para perder peso es APRENDER A COMER SANO.
Cuatro consejos básicos para mantener tu peso ideal:
- Comer comida real: agua, frutas, nueces, huevo, carne y pescado. Si no existía durante el Paleolítico, no te lo comas. No es necesario ni pesar lo que comes ni contar calorías.
- Muévete con ejercicio intenso y coge pesos: ejercicio intenso, muy intenso, en periodos cortos de tiempo, y favoreciendo los movimientos que requieren explosividad. Puedes practicar Artes Marciales, Tabatha, HIIT, Crossfit, Insanity. Practica también deportes de fuerza como la barra libre, vete a la sala de pesas, GAP, Core, y si te gusta hacer ejercicio con música, haz Body Pump.
- Duerme y descansa. Duérme durante 8 o 9 horas y dale tiempo al cuerpo a reponer energía antes de volver a hacer ejercicio.
- Evita ingerir azúcares y harinas.
Mi experiencia personal este último año:
Si cumples estos 4 dogmas, incluso aunque no hagas demasiado ejercicio, solo si te mueves un poco, seguro que adelgazas casi sin querer. No hay que contar calorías, ni pesar las cosas, solo es preocuparte por comer comida real, y comer hasta saciarte.
En casa, somos 5 miembros, cambié nuestra dieta diaria a una dieta paleo, no demasiado estricta.
Nuestra dieta paleo light: en casa seguimos tomando fuet, bacon, jamón cocido, latas de atún, tofu, leche de soja, yogures de soja, caldo de pollo de tetrabrick, yogures, queso, …
En este último año observé dos cosas muy curiosas.
No tienes porque gastar más dinero del habitual, compra comida real, no tienes que ir a una tienda especializada en nutrición, basta con ir a la plaza y visitar la frutería, la pescadería y la carnicería.